El Parkinson es una de la principales enfermedades que padecen nuestros mayores. Esta es una afectación el cual consiste en un trastorno del movimiento que afecta al sistema nervioso. Uno de los principales problemas que causa esta patología es problemas en el movimiento muscular. Es una enfermedad crónica y que va progresando a medida que pasa el tiempo, por lo que no tiene cura. Aún así, el tratamiento puede ayudar a aliviar los síntomas y ofrece una mejor calidad de vida al paciente.
Los síntomas principales son:
1. Temblores: Sacudidas en manos, brazos, piernas, mandíbula o cara, más evidentes en reposo y afectando un lado del cuerpo.
2. Movimientos lentos: Dificultad para realizar tareas simples rápidamente, como abotonar una camisa.
3. Músculos rígidos: Los músculos se ponen tensos, complicando movimientos básicos como ponerse de pie.
4. Problemas de postura y equilibrio: Dificultad para mantener una postura derecha y problemas al caminar.
Otros síntomas incluyen dificultad para caminar, contracción al escribir, expresión facial reducida, movimientos rápidos y síntomas no motores como pérdida del olfato, cambios de ánimo, problemas de sueño y más. Algunas personas pueden desarrollar problemas cognitivos, como pérdida de memoria y demencia.
Por todas estas limitaciones, que muchas veces se asocian a esta enfermedad, es importante que tanto las personas que la sufren, como los cuidadores de los mismos o nosotros como familiares, tengamos en cuenta diferentes aspectos para que tengan una mejor calidad de vida.
En este artículo te ofrecemos diferentes consejos prácticos que podrás implementar para ello. Planificar con antelación Vivir con el mal del Parkinson es para cualquier persona un reto diario. Hay que pensar que, y tal y como hablamos anteriormente, esta enfermedad trae consigo algunas limitaciones que entorpecen la realización de actividades cotidianas.
La Planificación Previa.
Vivir con el mal del Parkinson es para cualquier persona un reto diario. Hay que pensar que, y tal y como hablamos anteriormente, esta enfermedad trae consigo algunas limitaciones que entorpecen la realización de actividades cotidianas.
La planificación previa es un tip muy a tener en cuenta para que las personas puedan tomarse el tiempo que necesitan, evitando la frustración que puede traer la imposibilidad de hacer las tareas del día a día a un ritmo normal.
1. Mantener anotaciones en un cuaderno: es una buena herramienta para tener control de todos los medicamentos que han sido indicados. Esto es especialmente útil cuando nuestros familiares deben ser hospitalizados, o en el caso de que su cuidador profesional tenga alguna emergencia.
2. Colocar los números de emergencia en lugar visible: es importante que los coloquemos cerca de todos los teléfonos del enfermo y que el listado incluya teléfonos de personas cercanas y familiares.
3. Tener información detallada: debemos pensar que información es útil para tomar decisiones importantes como sería seguro de salud y los beneficios y servicios que cubre, opciones disponibles para coberturas de cuidados a largo plazo en dependencia de nuestro lugar de residencia o empresas que asisten a dependientes con Parkinson.
4. Prepararse con anticipación: en caso de tener que realizar una diligencia urgente, mantenimiento o reparaciones en la vivienda.
Reconocer el cambio en los diferentes roles y en las relaciones interpersonales.
En la etapa avanzada de la enfermedad se ocasionan diferentes cambios en cuanto a planes a futuro o sueños. Como familiares aún cuando amamos a nuestro seres queridos, puede ocasionarnos sentimientos de enojo, dolor y tristeza. No nos sintamos culpables por ello, son reacciones normales que se encuentran asociados a la propia situación tanto para el enfermo como para nosotros como familiares.
Es por ello que queremos darte recomendaciones sobre estrategias que puedes utilizar para sobrellevar esta etapa.
1. Tomarse el tiempo necesario para el disfrute de la rutina diaria. Es importante valorar el tiempo que pasamos junto a nuestros familiares, durante actividades de la vida diaria, conversaciones y paseos.
2. Intentar no perder el sentido del humor. La actitud es lo más importante en nuestra vida así que no perdamos esta perspectiva.
3. Cuando la enfermedad está en estado avanzado, esto puede suponer para el cuidador una pérdida de la intimidad a causa del aumento de la dependencia. Es importante en esta etapa no perder la cercanía, expresar cariño y empatía. De esta forma podremos trasformar este cambio en algo positivo.
4.Muchas veces los cuidadores familiares terminamos asumiendo muchas tareas que por imposibilidad física o mental ya no puede realizar la persona con Parkinson. Es importante que valoremos la posibilidad de contratar servicios externos de apoyo a domicilio o asistencia en el hogar.
Sobre la higiene diaria.- La higiene diaria para personas que son dependientes es una cuestión de vital importancia para su calidad de vida. Para ayudarnos y ayudarlos en estas tareas conviene:
1. Tener una silla o taburete elevado delante del lavabo para facilitar en aseo.
2. Colocar objetos como alfombras, o elementos que sean antideslizantes y evitar caídas.
3. Se puede instalar una banqueta dentro de la bañera para que la persona pueda sentarse y facilitar el baño.
4. La higiene diaria es recomendable que se haga de forma detallada mediante ducha o baño, observando la piel, buscando áreas de roce como los codos, nalgas, talones y cabeza especialmente si se tiene poca movilidad.
5. Se debe secar bien la piel, sobre todo la grietas, pliegues o axilas.
6. Posteriormente al baño, cuidar la piel con crema hidratante en zonas donde exista una prominencia óseas.
7. Para el afeitado conviene utilizar maquinilla eléctrica a no ser que el paciente sea portador de marcapasos.
Sobre alimentación.
La hora de las comidas debe estar separada del horario de medicación. Por otra parte, tener una información sobre una buena nutrición nos ayudará a elegir los mejores alimentos que le aporten a nuestro ser querido los nutrientes que su organismo necesite.
De igual manera, es importante que la persona ingiera suficiente líquido, tomando entre 2 a 2,5 litros al día, lo cual representa entre 8 y 10 vasos diarios. Los líquidos más recomendables son el agua, zumos naturales, y leche.
Por otra parte la preparación de los alimentos es un tema a tener en cuenta. Elaborarlos de consistencia blanda puede ayudar que se ingieran de forma más fácil. Puedes también adecuar los instrumentos de comer como platos, vasos y cubiertos que puedan ser más cómodos para la persona.
Para mejorar la dificultad a la hora de comer.
La dificultad para comer es una limitante frecuente para aquellos que son afectados por el mal del Parkinson.
Debemos evitar la acumulación de comida e incentivar a que la persona coma lentamente, tomando pequeñas cantidades cada vez. Tragar solo en pequeños bocados y masticar los alimentos lo más posible. Al masticar, hacerlo que fuerza y auxiliarse de la lengua para mover los alimentos y hacerlo primero de un lado y después de otro.
Sobre la dificultad al caminar.
Si nuestros familiares tienen un bloque a la hora de caminar es bueno que intente primeramente levantarse y apoyar sus talones en el suelo. Posteriormente, sin inclinarse hacia atrás, deberá intentar balancearse sin moverse del sitio hasta que esté listo para dar pequeños pasos.
No es recomendable que la persona arrastre los pies al andar por lo que deberá parar cuando esto ocurra. En el caso de ir con un acompañante, este no deberá estar delante del paciente sino a su lado para no entorpecer el paso del mismo.
Sobre movilidad de la cama.
Para lograr que nuestro familiar pueda moverse mejor o cambiar de postura en la cama es recomendable:
1. Doblar las rodillas y apoyar los pies en la cama. Posteriormente ponerlas de lado hacia la derecha.
2. Entrelazar las manos y levantarlas estirando los codos.
3. Girar la cabeza y brazos hacia la derecha. Posteriormente agarrar el colchón para que pueda ajustar una mejor postura según su comodidad.
Para levantarse del suelo.
Las caídas son recurrentes en personas con problemas de movilidad a raíz de la enfermedad de Parkinson.
Te damos algunas recomendaciones para que tu familiar pueda afrontar de forma más segura este tipo de situaciones:
1. Es bueno que al caer, la persona espere unos minutos antes de intentar levantarse. En este momento debe intentar calmarse ya que el susto es la primera reacción cuando esto ocurre.
2. En caso de no poderse levantar por sí mismo es recomendable que mire a su alrededor la existencia de algún elemento de apoyo.
3. Deberá intentar moverse para ponerse lo más cerca posible del punto de apoyo.
4. Posteriormente intentar arrodillarse paralelamente al soporte con ayuda de sus brazos.
5. Doblar la rodilla del lado donde tenga más fuerza y equilibrio colocando el pie en el suelo.
5. Apoyarse sobre el pie y usando el punto de apoyo para ejercer fuerza para lograr levantarse y sentarse.
La decisión del mejor lugar donde vivir.
La decisión del lugar donde nuestro familiar va a vivir es un tema complejo pero que no se puede ignorar. De la decisión que tomemos dependerán los cambios que tengamos que hacer para adaptar las condiciones de nuestro hogar a la nueva situación.
Si la decisión es que nuestros seres queridos se mantengan en sus casas. debemos modificar e implementar diferentes cambios a nivel de estructura y utilizando elementos funcionales que hagan más fácil la vida de ellos y su movilidad por su entorno.
Si elegimos trasladarlos a una residencia es bueno que evaluemos si estas tienen las condiciones necesarias tanto en sus instalaciones para el cuidado de las personas que tienen la enfermedad de Parkinson. Si tienes dudas sobre los cuidados que necesita tu ser querido y necesitas apoyo externo para asistir a tu familiar, puedes contactar con nosotros.